La larga investigación de COVID corre el riesgo de perder impulso: necesitamos un moonshot

El Dr. Michael Peluso (investigador principal de LIINC) y Lisa McCorkell (cofundadora de la Patient-led Research Collaborative) sostienen que invertir 1.000 millones de dólares anuales durante los próximos diez años en la investigación de la COVID de larga duración podría mejorar la vida de millones de personas y ahorrar billones en costes económicos. Este aumento de la financiación podría conducir a una mejor coordinación entre los investigadores de la COVID Larga (que a menudo tienen diversas formaciones en medicina), a la identificación de biomarcadores de la COVID Larga (proteínas que pueden utilizarse para diagnosticar la COVID Larga), al desarrollo de más ensayos clínicos y de mayor envergadura que intenten tratar la enfermedad, y a arrojar más luz sobre otras afecciones crónicas asociadas a la infección, como la encefalomielitis miálgica (también conocida como síndrome de fatiga crónica).